Cómo plantar semillas Autoflorecientes

Cómo plantar semillas automáticas y obtener una cosecha de calidad y productiva, es una tarea un poco complicada si no se tiene un mínimo de experiencia con este tipo de plantas de marihuana. A esto se suma la importancia de elegir bancos con semillas de calidad, como las que ofrece GB Strains Auto.

Las variedades auto-florecientes no se pueden tratar como las plantas feminizadas o regulares, ya que son más delicadas, sobre todo su sistema radicular. Desde el comienzo debe conseguir que la raíz no sufra ningún estrés tipo hídrico o alimenticio y evite cualquier material o tela que pueda frenar su crecimiento, como podrían ser un jiffy. Ya que si la raíz de una variedad auto se frena, es muy complicado que vuelva a desarrollarse con normalidad, produciendo finalmente plantas enanas. El éxito en el cultivo de autos va a depender del desarrollo continuo de su raíz. Así que les enseñaremos qué pautas debe realizar y cómo obtener un desarrollo óptimo.

Cómo plantar semillas Autoflorecientes

La elección

Para empezar con buen pie, lo primero es la elección de la variedad auto con la que va a trabajar, ya que hoy en día dispone de varios tipos diferentes de autos. Puedes encontrar variedades Auto y Auto XL o XXL. Si vas a trabajar con una Auto, necesitas una maceta entre 7L y 11L, con este tamaño es más que suficiente para que la planta pueda expresar todo su potencial. Si cultivas Autos XL o Autos XXL, necesitarás una maceta que vaya desde los 11L, a los 18L para poder sacar el máximo potencial productivo. Así es cómo una planta autofloreciente puede dar semillas.

La germinación

En este caso va a intentar ofrecer el mejor medio para una germinación potente y correcta. Utilizará el BAC X Seed, ya que estimula y potencia la germinación, además de proteger frente hongos y bacterias. Una vez hayas hecho los pasos pertinentes del producto, es el momento de colocar las semillas en un tupper y realizar la técnica de germinado de la servilleta. La mantendrá a una temperatura entre 18 C° y 20 C°, hasta que la semilla abra.

La elección del sustrato

Para que una variedad auto desarrolle rápido el sistema radicular, necesita de un sustrato esponjoso y aireado. Para ello les recomiendo una mezcla que contenga un alto porcentaje de turba y fibra de coco, que sea rico en humus de lombriz para fomentar el enraizado y la alimentación. Al que añadiremos hongos y bacterias beneficiosas, que también ayudarán a un desarrollo explosivo de las raíces y las protegerán.

Primer trasplante

En este caso hay varias opiniones, hay cultivadores partidarios de hacer varios trasplantes y hay otros que prefieren no hacer ninguno y trasplantar directamente en la maceta definitiva. En este caso haremos el trasplante directamente en la maceta definitiva, para que la raíz no encuentre nada que frene su crecimiento.

Imaginemos que has elegido macetas de tela de 12L que van muy bien para el desarrollo radicular. Antes de introducir el sustrato en la maceta, debes deshacer los bloques compactados de turba y retirar todas las ramas que suelen contener. Seguidamente debes introducir el sustrato, levantar la maceta un par de centímetros del suelo y dejarla caer, repetir este paso varias veces. De esta forma se coloca homogéneamente el sustrato en la maceta sin compactar más de lo debido.

Una vez hemos rellenado la maceta dejando unos 5-7cm para llegar al borde, disponte a mojar el sustrato sin poner la semilla. Con agua de calidad a ser posible, con un Ph que oscile entre 5,5 y 6,5 y una Ec de 0,4, la cantidad utilizada será de 30 ml (1 vaso de agua). Después realiza el agujero con la medida justa para que la semilla quede enterrada por 0,5 cm de sustrato, e introduce la semilla con la raíz hacia abajo con mucho cuidado. Seguidamente pulveriza por encima para que adquiera la humedad suficiente para germinar correctamente. Después de estos pasos, debes mantener el sustrato húmedo en superficie y levemente mojado en profundidad, si observas que la parte superior empieza a secarse demasiado debes volver a pulverizar, realiza esta operación hasta que la semilla germine por completo.

Nota: Si colocas la semilla primero y después riegas, puedes perderla al crear agujeros en el sustrato y quedar enterrada más de lo debido, con este método estará todo en su sitio.

Debajo de la luz

Si vas a cultivar en Indoor, debes colocar la maceta debajo del foco a una distancia prudente para no quemarla. Debes dejarlo encendido las 24h hasta que veas que empieza a asomar la pequeña plántula. En ese momento cambia a un fotoperiodo de 20/4 y lo mantendrás así hasta que coseche.

Si vas a cultivar en outdoor, colócala en una zona entre sol y sombra, evitando exponerla durante las horas de mayor intensidad solar y de la luz directa durante demasiadas horas, con la intención de ir acostumbrándola al clima externo. Con el paso de los días la planta estará preparada para poder soportar la potencia del sol y empezar a crecer sin problemas. Recuerda protegerla contra el ataque de los pájaros, ya que son fanáticos de los brotes jóvenes. Tampoco debes olvidarte del frío nocturno, puedes resguardarla dentro de casa o crear un pequeño invernadero hasta que las temperaturas nocturnas sean más llevaderas.

Mantenimiento

Una vez tiene la planta germinada, debes mantenerla e ir alimentándola progresivamente para que vaya creciendo en condiciones. Lo primero es saber cuándo hay que volver a regar, en este caso cuando riegues, la maceta ganará peso y a medida que vaya secándose, ese peso irá disminuyendo. En el momento en el que notes que ha perdido más o menos un poco más de la mitad del peso, ese sería buen momento para volver a regar. Esto es muy importante, ya que si se pasa con el riego frenará el crecimiento de la raíz, y si no llega se secará demasiado, consiguiendo una disminución en el desarrollo.

Por otro lado recuerda que has dejado un margen de maceta sin rellenar. Esto se hace para evitar que la planta estire demasiado el tronco y pueda partirse, de esta forma también lo hará, pero podrá rellenar la maceta hasta que quede el sustrato a la altura de los cotiledones. Más tarde, de la parte del tronco que ha enterrado, nacerán nuevas raíces de las que la planta se beneficiará.

A partir de este punto, tendrás que aplicar una gama de abonos un riego sí y otro riego no, con tal de alimentarla y ayudar a que tenga energía para crecer todo lo que pueda. Crecerá por momentos y deberá ir aumentando la cantidad de agua de riego progresivamente. Para hacer un cálculo, la planta más o menos tiene que permanecer hidratada entre 2 y 4 días. Si tiene que regar cada día, seguramente esté regando con poca agua, y si riega cada 5 días, seguramente se habrá excedido con la cantidad de agua.

Etapa de floración

Las capacidad para realizar una floración productiva por parte de una auto, va a depender del sistema de raíces que haya creado. Por lo tanto si sabes que la planta ha desarrollado un buen sistema de raíces, podrás abonarla como a cualquier otra variedad. Si de lo contrario has desarrollado un sistema pobre, tendrá que reducir la intensidad del abonado. Debe tener especial cuidado en este sentido si quiere obtener la máxima producción.

Para evitar saturar el medio, recomendamos el uso de productos que se han diseñado para que la planta pueda asimilarlos rápidamente. En su defecto puede utilizar productos específicos para el cuidado de variedades auto, como la gama para autos de BAC. Cabe destacar, que estos y otros productos, los puedes encontrar en growbaratochile.cl tu grow shop online.

Cuando te dispongas a empezar con el abonado de floración y quieras que todo transcurra con normalidad, debes aplicar alimento un riego sí y otro no, con la idea de que la planta tenga margen para poder asimilar el nutriente acumulado. Aunque si eres un cultivador experimentado y las plantas están sanas, aplica el régimen de abonado que crea conveniente.

Lavado de raíces

El lavado de raíces es tan importante como cualquier etapa y la debes realizar bien. En este caso, para evitar un excesivo empapado del sustrato durante demasiado tiempo, es preferible realizar varios lavados con poca cantidad de agua, pero siempre asegurándote de que drene al menos un 20% del agua regada. Si limpias las raíces con una gran cantidad de agua, el sustrato tardará demasiado tiempo en secarse y la planta puede sufrir problemas causados por hongos.

Si tienes en cuenta los factores más importantes explicados en este artículo y sigues estos siete pasos a la hora de trabajar con variedades auto-florecientes, seguro que obtendrás excelentes resultados.