Para un desarrollo óptimo de las plantas de cannabis es imprescindible poner a su disposición macro y micro nutrientes específicos, en su justa medida y momento, para evitar la sobrefertilización y posibles carencias. El grupo principal es el que componen el N-P-K nitrógeno, fósforo y potasio. Estos componentes son los que la planta demanda en mayor cantidad y los que principalmente se encuentran en las bases nutricionales que nos ofrecen las distintas marcas de abonos cannábicos.
Entre los Micronutrientes se encuentran algunos indispensables para el desarrollo adecuado de las plantas como el calcio, magnesio, boro, zinc, molibdeno, azufre, cobre, hierro y algunos más. Aunque estos son menos demandados por las plantas, son igual de importantes que los macronutrientes, por lo que se deberán aportar en las dosis y momentos necesarios del cultivo.
Un buen plan nutricional y una buena aplicación de los mismos permite sacar el máximo rendimiento a las plantas de cannabis, minimizando el riesgo de carencias y sobrefertilización.
La forma más sencilla y efectiva de controlar los fertilizantes que se aplican es adquiriendo un lápiz medidor específico para este fin. De esta manera se pueden solventar los problemas de exceso y carencias de nutrientes en nuestros cultivos.
Al igual que es necesario aplicar un mínimo de fertilizante para el desarrollo de las plantas, es igual de importante no excederse con las cantidades o habrá problemas de sobrefertilización. Para ello se va a hablar de las causas más comunes por las que se produce y así poder evitarlas.
Causas más comunes de la sobrefertilización
- Utilizar excesivo fertilizante
Algo muy común entre los cultivadores primerizos, con el afán de conseguir grandes resultados, es aplicar más fertilizante del necesario, o aplicar mucha cantidad en un mismo riego, causando la sobrefertilización. Esto es contraproducente, ya que satura el medio de sales, provocando un bloqueo en las raíces. Todo ello se podrá saber al observar las plantas, ya que se ponen de un verde oscuro y los foliolos se curvan hacia abajo. En este punto se recomienda realizar un lavado de raíces con enzimas y proseguir con un abonado suave y progresivo.
- Empezar con agua base muy dura
Otro motivo por el cual se suele producir una sobrefertilización, es cuando se prepara la solución nutritiva con un agua muy dura. Algo bastante común, en algunas ciudades sobre todo cercanas a la costa y en las islas. En dichas ciudades el agua del grifo contiene grandes cantidades de sales. Cuando se realizan los riesgos partiendo de esta agua, se satura el medio de cultivo de las mismas, imposibilitando la absorción de nutrientes por las raíces.
Este tipo de agua, denominada agua dura, sumada a la cantidad de fertilizante que recomiendan aplicar los fabricantes de abonos, da como resultado una solución nutritiva con una Ec muy por encima de lo recomendado.
En estos casos, la mejor solución es instalar un filtro de ósmosis inversa, y si no es posible aplicar la mitad de dosis de fertilizante que indique el fabricante, para no provocar la sobrefertilización.
- No regular el PH
Para que las raíces puedan absorber los distintos nutrientes, el PH tanto del agua, como del medio de cultivo, deben de tener unos valores específicos. Si no se cuida este aspecto, los valores se desajustan, pudiendo sufrir exceso de absorción de alguno de los nutrientes provocando normalmente, muestras de deficiencia en otro. Esto se debe a que los nutrientes se complementan entre sí para poder ser absorbidos y cada uno de ellos se absorbe mejor a un pH determinado.
- Sustratos con una EC muy alta
Algo bastante habitual, es realizar la siembra en un sustrato no específico para esta fase, aun siendo específico para cannabis. Si se adquiere un sustrato más apropiado para la fase de floración o con una EC muy alta, se puede sufrir un exceso de nutrientes , incluso llegar a quemar las pequeñas raíces de las semillas. Así el crecimiento se ralentiza, llegando a marchitarse por completo.
Para impedir la sobrefertilización, se recomienda utilizar un sustrato light para realizar la siembra. Si se quiere utilizar un sustrato más cargado, por ejemplo, porque se va a cultivar variedades autoflorecientes en la maceta definitiva. Se pondrá un litro de sustrato light en la zona donde se coloque la semilla. De esta manera, hasta que no esté un poco desarrollada la raíz, no tendrá contacto con el sustrato más cargado.
Utilizar fertilizantes no específicos para cannabis
Muchas veces se peca de ingenuos al pensar que utilizando un fertilizante común para todo tipo de plantas o uno específico para otro tipo de plantas que no son de cannabis (por ejemplo para orquídeas), será la solución nutricional para nuestras plantas de marihuana. Nada más lejos de la realidad, ya que este tipo de fertilizantes tiene concentraciones de macro y micro nutrientes que pueden ser muy elevadas, sufriendo una sobrefertilización tras su uso.
Para estos casos se recomienda utilizar fertilizantes específicos para cannabis y en caso de no poder, leer muy bien las etiquetas y diluir el producto todo lo que sea necesario. También es aconsejable realizar una prueba en una sola planta tras comprobar los efectos que produce y valorar si usarla en el cultivo completo o no.
Utilizar abonos orgánicos no compostados y sin conocer su valores
Muchas veces, sobre todo en el medio rural, se utilizan fertilizantes orgánicos, a base de heces de animales como, la gallinaza, estiércol de caballo, etc. Como plan nutricional para el cultivo. Estos contienen una concentración de nutrientes muy elevada, por lo que es preciso dejar secar y compostar durante un tiempo específico, si no al aplicarlo en las plantas se provoca un exceso de nutrientes, llegando incluso a quemarse.
Se recomienda utilizar este tipo de abono en exterior, tanto por el olor que producen como por la probabilidad de introducir alguna plaga en el cultivo. Hay que recordar que este tipo de abonos son de disponibilidad y asimilación lenta, por lo que no hay que excederse con las cantidades si no queremos sufrir problemas de sobrefertilización. Es mejor utilizarlos en suelo directo y no aplicarlos en macetas.
Asimismo, hay distintas soluciones enzimáticas como Enzym Boom, disponible en nuestro grow shop online en Chile, que ayudan a limpiar la saturación de sales en el medio de cultivo, así como a poner disponibles algunos nutrientes para las raíces también realizan procesos que ayudan a la absorción de los mismos. Se recomienda utilizar este tipo de productos en todos los riegos.
Hasta aquí un pequeño repaso de las principales causas de sobrefertilización en el cultivo de cannabis y cómo poner solución para poder sacar el mayor rendimiento a las cosechas. Cuando se vaya a cultivar se deben recordar todos estos consejos para evitar posibles susto, y por supuesto, elegir previamente semillas de calidad, como las de GB Strains.